Las radiografías abarcan el 80% de los estudios de imagen que utilizamos los Traumatólogos y Ortopedistas. En la mayoría de los casos, es el primer estudio que se solicita después de la evaluación clínica del paciente. Wilhelm Conrad Roentgen descubrió los Rayos X en 1895 y por esto recibió el Premio Nóbel de Física en 1901. Las radiografías son el estudio más utilizado, ya que es el más económico, con el que tenemos más experiencia y existe gran disponibilidad del mismo.
Cuando se toma una radiografía, los rayos X de mayor energía interactúan con los tejidos y al traspasarlos producen una imagen en el detector o película, esta imagen se usa para diagnóstico. En el siguiente órden, el tejido que más absorbe la radiación es: 1) El hueso, 2) Los músculos y el agua, 3) La grasa, y finalmente 4) El aire, es el que menos absorbe la radiación; de tal manera que los huesos se ven blancos en una radiografía y los pulmones (con mucho aire) se ven negros, el resto de los tejidos se ven con diferentes tonos de gris.
Para mejorar la calidad de la imagen y limitar la radiación dañina al paciente, los aparatos modernos de Rayos X utilizan una serie de filtros de aluminio y plomo. En los últimas dos décadas, la radiología digital ha tomado cada vez importancia. Algunas de las ventajas de la radiología digital son: Menor costo, mejor calidad de imagen ya que permite modificar el brillo, contraste, tamaño, etc. Facilidad de almacenamiento de las imágenes, facilidad de envío electrónico a distancia, además evita el uso de las películas de rayos X disminuyendo la contaminación, y disminuye también en cerca de un 50% la radiación al paciente.
La radiación producida por los Rayos X es dañina para los tejidos, en particular para los bebés en formación (sobretodo entre la 8ª y 16ª semana de embarazo) y los niños pequeños. Por esto es indispensable tratar de evitar o disminuir al máximo la radiación en mujeres embarazadas y niños pequeños.
Los principales efectos negativos de la radiación son 1) Producción de Cáncer y 2) La aparición de defectos o malformaciones genéticas. Sin embargo las dosis producidas por una radiografía son mínimas, y no llegan a producir estas lesiones. De cualquier manera se recomienda limitar el número de radiografías al mínimo indispensable. Las mayores dosis de radiación son producidas por estudios como el TAC (Tomografía Axial Computarizada) la cual implica una radiación similar a unas 100 radiografías, la Gamagrafía (estudio que utiliza substancias radioactivas) y la Radioterapia utilizada para el manejo de algunos tumores.
Aunque en nuestro país no es práctica común proteger a los pacientes a los que se les realizan radiografías, en los países del primer mundo sí, generalmente se utilizan protectores de plomo para cubrir principalmente el cuello (Tiroides) y batas o mandiles para proteger los testículos encargados de la producción de esperma en los hombres y los ovarios y glándulas mamarias en las niñas o mujeres. Afortunadamente los aparatos modernos de Rayos X, tienen colimadores que dirigen la mayor parte de la radiación al sitio a estudiar, disminuyendo la radiación al resto del cuerpo.
Otra manera de disminuir la exposición a la radiación es utilizar estudios como el Ultrasonido (Eco) que utiliza ondas de sonido o la Resonancia Magnética que utiliza ondas de radio, las cuales no son dañinas.
En Resumen:
1) Se debe disminuir la exposición a la Radiación Ionizante de los Rayos X, y sobre todo a la de los TAC´s y Gamagrafías lo más posible.
2) Cuando se requiere hacerlo, se deben utilizar aparatos modernos de Rayos X los cuales cuentan con colimadores, y de preferencia digitales, ya que con estos se disminuye la radiación y la necesidad de repetir radiografías por mala calidad.
3) Se debe de cubrir el cuello, el pecho y el abdomen bajo con protectores de plomo especiales, sobre todo en mujeres embarazadas, niños y jóvenes.
4) Las mujeres embarazadas deben de informarle su estado a su médico y al personal de enfermería y de radiología. Y se debe evitar al máximo tomar radiografías, en particular en los primeros 3-4 meses del embarazo.
5) Otra opción es usar Ultrasonido o Resonancia Magnética ya que estos no producen radiación dañina, aunque estos son más costosos.