La próstata es una glándula que forma parte del aparato reproductor masculino. Se encuentra por debajo de la vejiga, y rodea a la uretra (conducto que permite la salida de la orina). Su principal función es producir liquido que forma parte del semen. El Cáncer de próstata es uno de los más comunes en hombres, especialmente después de los 65 años. Se calcula que más del 50% de los hombres mayores de 80 años lo padecen, aunque un buen número de ellos ni siquiera lo saben.
Los principales síntomas son de obstrucción urinaria, incluyendo: Salida de orina muy débil o interrumpida, dificultad para empezar a orinar, goteo al final de orinar, urgencia para orinar, ardor o dolor al orinar, sangre en la orina, orinar muchas veces al día y especialmente más de dos o tres veces por la noche.
El diagnóstico se hace además de estos signos por un Exámen físico que implica un tacto rectal, a través del cual se puede tocar el crecimiento y endurecimiento de la próstata. Determinación del antígeno prostático en sangre, el cual se encuentra elevado, Ultrasonido prostático, y finalmente por una Biopsia. Estudios como el TAC, Resonancia, Gamagrama Oseo, etc. sirven para determinar la extensión de la enfermedad.
Una vez establecido el diagnóstico se deben considerar los siguientes factores para decidir el tipo de tratamiento a emplear: 1) Extensión del tumor (solo en la próstata o ya extendido a otros órganos y tejidos) 2) Tipo de tumor y su tendencia a crecer (esto se puede determinar por el nivel del Antígeno en sangre y los resultados de la biopsia) 3) Edad y estado de salud del paciente 4) Ventajas y desventajas de cada uno de los tratamientos y finalmente 5) Que es lo que el paciente y su familia quieren hacer.
Antes de hablar de las opciones de tratamiento, es importante recordar que la mayoría de los pacientes con Cáncer de próstata no fallecen a causa de esta enfermedad, ya que estos tumores tienden a crecer muy lentamente a través de los años.
OPCIONES DE TRATAMIENTO:
* Observación y Vigilancia cercana. En esta no se realiza ningún manejo y solo se esta checando periódicamente cambios en los síntomas, exámen prostático, niveles del Antígeno Prostático en Sangre, y/o en estudios como Ultrasonido y Resonancia Magnética.
Este tipo de conducta es posible, ya que como mencionamos previamente, la mayoría de estos tumores crecen muy lentamente; por lo que los riesgos y complicaciones de los diversos tipos de tratamiento pueden ser mayores que los de la misma enfermedad.
* Cirugía. La cual puede realizarse a través de la uretra mediante una sonda, en los casos en los que el cáncer es pequeño y se encuentra localizado dentro de la próstata (esta cirugía es llamada RTU o Resección Trans Uretral). Otra opción es la llamada Prostatectomía Radical la cual implica la remoción completa de la próstata y tejidos adyacentes, esto clásicamente se ha realizado a través de una incisión grande en la parte baja del abdomen, en los últimos años se ha estado utilizando la cirugía robótica para realizar este mismo procedimiento a través de pequeñas incisiones, con menor daño a los tejidos alrededor de la próstata, menos sangrado y con una recuperación más rápida. La principal ventaja de la cirugía es que nos permite resecar todo el tejido canceroso. Sus principales inconvenientes son que en un gran número de los casos, se produce Incontinencia Urinaria (incapacidad para controlar o retener la orina) e Impotencia (incapacidad para lograr una erección) estos problemas pueden ser temporales o persistir durante toda la vida.
* Radioterapia, la cual utiliza rayos x de alta energía, o substancias radioactivas aplicadas directamente, para “quemar” o matar las células cancerosas. El principal inconveniente de la Radioterapia es que afecta a los tejidos vecinos, principalmente la vejiga y el recto, produciendo dolor, diarrea, etc.
* Terapia Hormonal. Esto es debido a que el crecimiento del Cáncer de próstata es estimulado por las hormonas masculinas (testosterona) por lo que se pueden utilizar substancias que bloquean su producción o sus efectos. En casos seleccionados se pudieran usar hormonas femeninas o incluso realizar la extirpación de ambos testículos.
* Quimioterapia
* Terapia Biológica o Inmunoterapia, la cual estimula el Sistema Inmunológico para atacar las células cancerosas. (Ver Boletín 151)
En los casos en los que el Cáncer se ha extendido a los huesos u otros tejidos, se puede requerir de medicamentos para control de dolor (Analgésicos), desinflamar (Cortisona, Esteroides) o fortalecer los huesos (Bifosfonatos).
RECUERDE QUE CADA CASO ES DIFERENTE Y LAS DIFERENTES OPCIONES DEBEN SER DISCUTIDAS CON SU MEDICO UROLOGO Y ONCOLOGO
Boletín 154. Cáncer de Próstata
