La Articulación Acromioclavicular forma parte de la articulación del hombro. Se encuentra en la parte superior del mismo y está formada por la unión entre la clavícula y el acromion (hueso que se encuentra en la parte más alta del hombro). Esta lesión es más común en deportistas jóvenes, generalmente sucede como consecuencia de una caída sobre el hombro, comúnmente una caída de bicicleta o una caída en deportes de contacto como en el futbol americano, soccer, basketball, etc.
Para que la clavícula se desplace y salga de su posición habitual se requiere que los ligamentos y la cápsula de la articulación se rompan y permitan su desplazamiento. Esto se manifiesta como una prominencia de la clavícula en la parte superior del hombro (el hueso se ve saltado o fuera de su posición), en algunos casos el desplazamiento es mínimo y los ligamentos solo se estiran, pero no se alcanzan a romper, a esto se le conoce como un Esguince. Además del dolor y la deformidad el paciente generalmente tiene limitada la movilidad del hombro. El diagnóstico se confirma con una radiografías del hombro, donde se demuestra el grado de desplazamiento y se verifica que no existan fracturas asociadas. En la gran mayoría de los casos no es necesario estudios más sofisticados como TAC o Resonancia Magnética.
El tratamiento depende principalmente del grado de desplazamiento de la clavícula. En los casos en los que no hay desplazamiento, o este es mínimo, el manejo incluye la protección del hombro con un cabestrillo o inmovilizador de hombro, medicamentos para el dolor, anti-inflamatorios y hielo durante los primeros 3 días. El cabestrillo se retira tan pronto el dolor permite la movilidad del hombro, generalmente alrededor de dos semanas después y se inicia un período de rehabilitación. Por el contrario, cuando la lesión de los ligamentos y la cápsula articular permiten un desplazamiento mayor, la deformidad es más severa y la clavícula se encuentra completamente fuera de su lugar, se recomienda una cirugía para regresarla a su posición original, reparar los ligamentos rotos y fijar la clavícula ya sea con un tornillo y/o suturas especiales para mantenerla en su sitio mientras los ligamentos cicatrizan por completo y regresa la estabilidad a la articulación. Existen sin embargo algunos casos con desplazamientos moderados, en los que se tiene que tomar una decisión individualizada según las características del paciente. En general entre más joven, activo y delgado es el paciente se recomienda la cirugía; en los pacientes de mayor edad, poco activos o mas corpulentos (esconden más fácil la deformidad) se pueden manejar sin cirugía con prácticamente los mismos resultados. En las mujeres la deformidad estética que produce esta luxación no es bien aceptada, por lo que la mayoría prefieren la cirugía.
Afortunadamente casi todos los pacientes recuperan la movilidad completa del hombro, así como la fuerza y capacidad de realizar actividades físicas al mismo nivel del que tenían antes de la lesión. Sin embargo un pequeño porcentaje de pacientes pueden presentar dolor o molestias al realizar actividades físicas intensas tanto si es manejada en forma quirúrgica o no. En estos casos se puede requerir de fisioterapia, la aplicación de medicamentos anti-inflamatorios en el área o incluso una cirugía para el control del dolor.