Boletín 215. La Soledad y su Salud

Estudios recientes han demostrado que la soledad, o aislamiento social tiene grandes implicaciones para la salud. De hecho puede ser tan dañino o más que la obesidad, el fumar, el tener malos hábitos alimenticios o el sedentarismo. Una persona solitaria tiene un 30%, algunos creen que hasta el 60% más de probabilidades de morir que el promedio.
Según una revisión de estudios publicados en la literatura médica, la soledad, el aislamiento social, o el vivir solo tiene un efecto negativo sobre la salud, la calidad y expectativa de vida.
La Soledad es una de las Epidemias de nuestro tiempo. La gran cantidad de divorcios, el cambio de domicilio buscando empleo o para alejarnos de la inseguridad, y los adultos mayores que se quedan alejados de sus familias son causas comunes de este aislamiento.
Algunos de los factores que se asocian a la soledad y aislamiento social, que a pesar de los avances tecnológicos y de comunicación, cada vez es más común, son: Depresión, Ansiedad, Demencia (incluyendo Enfermedad de Alzheimer), Abuso de substancias prohibidas, incluso Enfermedad Bipolar (Maniaco-Depresiva) y Esquizofrenia. El aislamiento, tanto real como psicológico, está también íntimamente relacionado con el SUICIDIO. Aunque no todas las personas solitarias se suicidan, prácticamente TODOS LOS QUE SE SUICIDAN SON O SE SIENTEN SOLITARIOS.
Además existen muchas circunstancias en las que una persona solitaria o aislada puede verse afectada en su salud, si esa persona tiene un accidente o una enfermedad súbita, no habrá nadie cercano para ayudarle. Otra situación es que no habrá nadie cercano para darse cuenta de cambios producidos por enfermedades que el enfermo no es capaz de detectar. Las personas solitarias son más propensas a descuidar su aseo personal, olvidar tomar sus medicamentos, o no tener hábitos saludables (hacer ejercicio con regularidad, dieta saludable, horarios apropiados de sueño, etc.). Para decirlo de otra manera, las personas tenemos una mejor oportunidad de tener una buena calidad de vida y sobrevivir, si lo hacemos en un grupo familiar que aislados.
Se ha demostrado también que las personas solitarias tienen más probabilidades de desarrollar cáncer, infecciones y enfermedades del corazón lo cual aumenta su mortalidad y disminuye su calidad de vida. El aislamiento eleva los niveles de cortisol (la hormona del stress) y la presión arterial, lo cual aumenta el riesgo de infartos al corazón y embolias cerebrales.
En Resumen LA SOLEDAD PUEDE MATARTE, aún más que los malos hábitos o incluso la Diabetes y Obesidad. Y en el mejor de los casos, afecta negativamente tu salud.
Es importante por lo tanto, integrar a nuestros familiares: Padres, Hermanos, Amistades (e incluso nosotros mismos) a la actividad en grupos o comunidades sociales y así disminuir los riesgos y problemas asociados con el aislamiento social.