De nuevo ha surgido un brote de Influenza en México, esta vez se han reportado 1,997 casos del 15 Octubre a mediados de Febrero, afortunadamente más de la mitad (55%) son del tipo AH3N2, (el cual es mucho menos agresivo y se le conoce también como Influenza común o Estacional), un 30% del AH1N1 y un 11% del Tipo B. Se han reportado 79 defunciones (68%) por H1N1, 18% por H3N2, 9% por Influenza B y 5% por otros tipos. Dos tercios de los que fallecieron eran hombres y todos habían sido hospitalizados. En Nuevo León se han presentado 187 casos, con una sola defunción en una mujer diabética e hipertensa de 40 años. Solo 4 de estos 187 casos son del tipo AH1N1, el cual es más agresivo.
Como contraste en el 2014 se presentaron mas de 6,000 casos y cerca del 80% fueron producidos por el AH1N1 (El más agresivo), y cerca del 10% por el AH3N2; se registraron 626 defunciones, la gran mayoría (571) fueron por el AH1N1. En la epidemia mundial del 2009-2010 fallecieron unas 250,000 personas y entre 1918-19 en la llamada Gripe Española murieron unas 20 Millones de personas.
Por lo tanto, el brote actual no debe alarmarnos, se considera como normal en la temporada de invierno. Como lo comentamos en el Boletín 49, la Influenza es una enfermedad estacional producida por 3 Tipos de Virus (A,B y C), que se manifiesta por un inicio súbito de fiebre elevada, ataque al estado general, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares. Se transmite por contagio de persona a persona a través de gotas de saliva al estornudar o toser, o al saludar de mano o beso. También se puede transmitir al tomar o comer de los mismos vasos, platos, cubiertos, etc. Afortunadamente existe una serie de medicamentos que son efectivos para detener o disminuir los síntomas y progresión de la enfermedad. El más conocido es el Tamiflu (Oseltamivir).
Aunque la gripe o resfriado común también se transmite de la misma manera, esta es producida por más de 100 virus diferentes, tiene un cuadro clínico más benigno, que se caracteriza por leve ataque al estado general, congestión nasal, fiebre leve, estornudos. Y no existe un tratamiento específico para la misma, se manejan los síntomas con medicamentos para la congestión nasal, fiebre, etc.
En el caso de la Influenza las personas más susceptibles son los niños pequeños, adultos mayores de 65 años, personas con enfermedades crónicas como Diabetes, Hipertensión, Obesidad, Fumadores y aquellos con un Sistema Inmunológico comprometido como los que tienen Cáncer, especialmente si están recibiendo quimioterapia. En este grupo de pacientes se recomienda la vacuna anual contra influenza, de preferencia en los meses de Octubre o principios de Noviembre antes de que inicie el invierno.
Los Signos de alarma en adultos son: Dificultad respiratoria, Vómito y Diarrea persistentes. En niños además de estos, Fiebre mayor a 38 grados, Irritabilidad, Rechazo a los alimentos y Crisis Convulsivas. Cuando estos se presentan se requiere atención médica urgente.
Las principales medidas de prevención son: Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón. Cubrirse la cara al estornudar o toser con la parte interna del codo o con un pañuelo desechable, NO CON LAS MANOS (Ya que luego al saludar a alguien, o tocar cualquier cosa, estaríamos contaminándolos). No Escupir, NO tocarse la cara, en particular la boca, nariz y los ojos, No saludar de beso, ni de mano. No compartir alimentos o utensilios como vasos, platos, etc. y no ir a lugares concurridos.
En caso de presentar síntomas que sugieran Influenza acudir al médico para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento temprano, ya que los medicamentos antivirales son más efectivos cuando se inicia su uso en los primeros dos días de la enfermedad.
NO AUTOMEDICARSE con Antibióticos o Antivirales, ya que los medicamentos además de que pueden esconder los síntomas y hacer más difícil el diagnóstico, pueden producir una serie de efectos secundarios indeseable