Boletín 265. La Diálisis

Se refiere al proceso que utilizamos para “lavar o limpiar” la sangre cuando los riñones no lo pueden hacer. Mencionamos la semana pasada que los riñones tienen como principal función filtrar la sangre para retirar, a través de la orina, el exceso de líquidos y substancias tóxicas que de otra manera se acumulan en el cuerpo. Además los riñones tienen un gran impacto en la regulación de la presión arterial, la formación de la sangre y la salud de nuestros huesos. En la mayoría de los casos la función de los riñones se va deteriorando lenta y progresivamente, a esto se le denomina INSUFICIENCIA RENAL CRONICA, casi siempre en forma irreversible. En otros casos la función de los riñones se puede dañar en forma súbita, ya sea por algún medicamento, un accidente que lesione los dos riñones; o cuando hay una pérdida sanguínea severa o una baja severa de la presión arterial, en estos dos últimos casos, al no llegar sangre a los riñones estos se dañan, a esto se le denomina INSUFICIENCIA RENAL AGUDA, y con frecuencia se puede recuperar la función de los riñones.
Existen dos tipos de Diálisis: La Diálisis de la Sangre (Hemodiálisis) y la Diálisis Peritoneal. En la primera, se extrae la sangre a través de catéteres y es llevada a una máquina que realiza el filtrado o limpieza de la misma y luego la regresa al cuerpo a través de otro catéter. Este tipo de Diálisis se realiza en un Centro Especializado para este propósito o en un Hospital. Generalmente se realiza 2-3 o más veces por semana y tarda alrededor de 6 horas.
Antes de iniciar la Hemodiálisis es indispensable hacer un Acceso a donde se le conectan los Catéteres encargados de llevar y traer la sangre. Habitualmente se realiza una conexión entre una vena y una arteria en el antebrazo, llamada Fístula Arteriovenosa, la cual requiere de varias semanas antes de poder utilizarse, casi siempre por muchos años. Otro método es colocar una Cánula o Catéter artificial en el antebrazo y por ahí hacer la diálisis, esto se hace cuando las venas del antebrazo son muy delgadas. Cuando se requiere en forma urgente hacer una Hemodiálisis se puede colocar un catéter a través de las venas del cuello o de la ingle, este generalmente se usa por días o semanas mientras la función del riñón se recupera o los accesos definitivos en el antebrazo están listos.
La Diálisis Peritoneal implica el uso de varios litros de una solución, como un suero, que se “mete” al abdomen a través de un catéter y luego se extrae horas después a través de ese mismo catéter. En este tiempo las substancias dañinas y el exceso de líquidos es absorbida por este líquido. La diálisis peritoneal generalmente se realiza en casa, todos los días o todas las noches. Se extrae el líquido “sucio” y se coloca nuevo líquido para estar limpiando la sangre en forma contínua. Este proceso de extraer el líquido y colocar el nuevo generalmente tarda menos de una hora.
Por supuesto que existen muchos inconvenientes, costos, complicaciones, etc. asociados al proceso de Diálisis, por lo que siempre que sea posible se deberá intentar realizar un Trasplante de Riñón. Entre estos se encuentra su elevado costo, el tiempo que se requiere para realizarlo, el hecho de que es “de por vida”, el riesgo de infección, y el hecho de que al lavar o limpiar la sangre muchos de los pacientes presentan náuseas, vómitos, dolor de cabeza, debilidad, sensación de malestar, etc. Y por supuesto que realizar la Diálisis no puede lograr por completo restaurar la función de los riñones. Esto quiere decir que el paciente vive “parcialmente” enfermo, requiere de una dieta especial, restricción de la ingesta de líquidos y sal. Además tiene que tomar una serie de medicamentos para poder ayudar a mejorar o mantener su salud.
Por todo lo anterior, lo ideal es prevenir o evitar el daño a la función de los riñones. Esto se logra con Buenos hábitos (Dieta y Peso saludables, hacer ejercicio, etc.). Además de control apropiado de la Diabetes y la Hipertensión arterial. Tratamiento de infecciones urinarias y cálculos (piedras) en la vía urinaria.
Cualquier duda deberá consultarse con su Médico especialista en Nefrología.

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