Boletín 275. Glaucoma

El Glaucoma se refiere a un grupo de enfermedades que se caracterizan por pérdida progresiva de la visión, generalmente asociada a un aumento en la presión dentro del ojo.
Normalmente el ojo tiene varias cámaras llenas de líquido, el cual se forma y se reabsorbe en forma continua, en esta enfermedad el líquido no se reabsorbe en forma normal y esto produce un aumento en la presión dentro del ojo que lesiona el nervio óptico. La forma más común se le denomina Glaucoma Crónico o Glaucoma de Angulo abierto generalmente se presenta en personas mayores de 40 años, y en especial arriba de los 60 años, tiene un origen hereditario por lo que es común que se presente entre los miembros de una misma familia, otros factores asociados son: Diabetes, Miopía severa (Dificultad para ver de lejos), y personas de raza negra.
En la mayoría de los casos este tipo de Glaucoma no produce síntomas y se caracteriza por la pérdida progresiva de la vista, afecta inicialmente a la visión periférica, por lo que al principio no afecta la lectura. No produce dolor ni otras manifestaciones, por lo que es común que las personas afectadas no se den cuenta hasta que la enfermedad está muy avanzada y ha afectado severamente la visión. Se calcula que entre el 1 y 2% de las personas serán afectadas por esta enfermedad. En Estados Unidos unas 3 Millones de personas tienen Glaucoma, y la mayoría aún no lo saben. En el mundo entre 60 y 100 Millones de personas tienen Glaucoma. Es la segunda causa de ceguera en el mundo, solo después de las Cataratas y solo en Estados Unidos unas 120,000 han quedado ciegos por esta enfermedad. Este tipo de Glaucoma responde bien al tratamiento, sobretodo si se detecta en etapas tempranas. En los países en desarrollo una infección por parásitos que afecta a los ojos, llamada Oncocercosis es más común que el Glaucoma como causa de ceguera. Esta es común en el Sur de México.
El manejo generalmente es a base de medicamentos que se aplican como gotas en los ojos y ayudan a disminuir la presión del ojo, mejorando la reabsorción del líquido dentro del ojo. En algunso casos se requiere de cirugía para detener el avance de la enfermedad. Debido a que no existe un tratamiento que “cure” el Glaucoma al 100%, es muy recomendable que todas las personas nos hagamos un cheque ocular con un Especialista en forma periódica. La Glaucoma Research Foundation sugiere revisones cada 2-4 años antes de los 40; de los 40-55 una vez cada 1-3 años, de los 55 a los 65 una vez cada 1-2 años, y de los 65 en adelante una vez cada 6-12 meses. Para las personas con factores de riesgo (Diabéticos, Familiares de personas con Glaucoma, Raza Negra, etc.) se recomienda checarse cada 1-2 años a partir de los 35 años.
Existen otros tipos de Glaucoma, menos comunes. Uno de ellos es el Glaucoma de Angulo Cerrado o Glaucoma Agudo, este se presenta en forma súbita, generalmente produce dolor de los ojos, dolor de cabeza, náuseas, visión borrosa y una especie de arcoíris alrededor de las luces en la noche. Este tipo de Glaucoma requiere de cirugía urgente para disminuir la presión del ojo, y evitar daño irreversible al Nervio Optico lo cual puede producir pérdida severa y permanente de la visión; esto se hace mediante una Cirugía Laser o Convencional en la que se abre una pequeña “ventana” en el iris para permitir el drenaje del líquido acumulado a presión.
Otro tipo es el llamado Glaucoma Congénito, este afecta a 1 de cada 10,000 niños y generalmente produce ceguera en los primeros 3 años de vida. El Glaucoma también puede ser producido por golpes al ojo, sangrado dentro del ojo, problemas del cristalino, etc. También existe el llamado Glaucoma con Presión Intraocular normal, en este caso el nervio óptico se va dañando progresivamente, sin embargo la presión del ojo se mantiene en niveles normales (alrededor de 20 mm de mercurio).
Existen 5 pruebas básicas que los Doctores Oftalmólogos realizan para poder hacer el diagnóstico de Glaucoma:
1) Tonometría, en la cual se mide la presión del ojo
2) Chequeo visual con el ojo dilatado, en la cual se revisa la forma y color del nervio óptico a través del aparato llamado oftalmoscopio (lente especial para ver el ojo)
3) Perimetría o Chequeo de los campos visuales, donde se puede detectar la pérdida de la visión periférica
4) Gonioscopía: En esta prueba se mide el ángulo donde el iris y la córnea se encuentran, de ahí salen los nombres de Glaucoma de Angulo Abierto o Cerrado, y
5) Paquimetría: En la que se mide el espesor de la córnea.
En caso de cualquier duda consulte a su Oftalmólogo de confianza. Y si tiene tiempo de no ir a una revisión, considera hacerlo, especialmente si tiene más de 40-50 años.

Written by